¡Saludos desde Sevilla! El otro día, mientras esperaba a unos amigos para ir a la feria, vi que en un grupo de chat alguien comentaba sobre un lugar para jugar al blackjack online. Entré por curiosidad y lo probé en mi móvil. La emoción de cada mano me tuvo enganchado, y lo más gracioso es que empecé perdiendo, pero terminé con un par de jugadas maestras que me hicieron ganar de nuevo. spino gambino terminó siendo una buena sorpresa para matar el tiempo.